¿Quién fue Lisandro Meza?

Lisandro Meza Márquez o sencillamente Lisandro Meza, fue un cantante, compositor, arreglista y acordeonista colombiano. Estuvo en la escena musical por más de sesenta años. Durante ese tiempo fue conocido también por diferentes apodos, entre los que se mencionan los siguientes. El Macho de América, El Rey sin Corona y El Sabanero Mayor.

Nació en el corregimiento El Piñal, Los Palmitos, departamento Sucre, Colombia, el 26 de septiembre de 1937. Murió el 23 de diciembre de 2023 en la ciudad de Sincelejo, capital del mencionado departamento. Un accidente cerebro vascular fue la causa de la muerte. Tenía ochenta y seis años de edad.

Podría decirse, sin exagerar, que trabajó hasta el final de sus días. Poco tiempo antes del percance de salud, por el que fue internado, estuvo compartiendo con sus seguidores en Instagram. Durante su larga trayectoria musical, construyó un importante catálogo discográfico. Estrenó más de un centenar de álbumes, la mayoría grabados en estudio. Abordó diferentes géneros de la rica música popular de Colombia. Dejó un gran legado para la cultura musical de su país. Es reconocido como uno de los principales exponentes y difusores de la música folclórica colombiana.

De un cantante con una tan obra prolífica, es difícil seleccionar sus canciones más exitosas. Sin embargo, siempre será recordado por sus temas más solicitados, como los que se mencionan a continuación. "Cosas de la vida", "El ocaso de una flor", "Mamando gallo", "Cumbia de los locos" y "La chichera". Asimismo, por "La miseria humana", "Entre rejas", "El guayabo de la ye", "La baracunataca" y "Me voy pa' la Luna". Pero también, por "Estás pillao", "La matica", "El polvorete", "El hijo de tuta" y "El siete", entre muchos otros.

Su legado va mucho más allá de las abultadas cifras producidas por su éxito comercial. Propulsor y divulgador de la música colombiana por el mundo, dejó una huella profunda. Con su 'música para alegrar el mundo', como bien dijera su esposa durante el velatorio, llegó a millones de aficionados.

Niñez, Juventud y Vida Familiar

Lisandro Meza nació y creció en El Piñal, en el seno de una numerosa familia. Fue el cuarto de nueve hermanos. Sus padres fueron Raymundo Meza y Victoria Márquez. En ese pueblo rural colombiano, demostró sus dotes musicales desde muy temprana edad. Siendo apenas un niño empezó a cantar en La Armenia, la finca ganadera de su padre.

Pronto puso de manifiesto sus grandes habilidades también como instrumentista. Aprendió a tocar acordeón, piano, guitarra, bajo, tiple, cuatro, tumbadora, caja y la gaita. Aprovechaba la ausencia de uno de los trabajadores de la finca, propietario de un acordeón, para tocarlo a escondidas.

Inicios de Lisandro Meza en la Música

Lisandro Meza comenzó su carrera musical, siendo un adolescente. En una celebración de Navidad, organizada por su padre para los trabajadores, resultó el alma de la fiesta. En esa ocasión tocó canciones populares, como "La hija de Amaranto", "Cumbia cienaguera" y "El alto del Rosario". Ese evento marcó el comienzo en firme de su carrera como acordeonero y cantante. Se iniciaba la década de los cincuenta.

Al empezar como profesional en la música de acordeón, Lisandro Meza reemplazó al maestro Aníbal Velásquez. Este era integrante del conjunto Los Vallenatos del Magdalena, de los hermanos Carlos Román y Roberto Román.

Sus temas iniciales los grabó en 1953, precisamente con los hermanos Román. Una de esas canciones, "Adiós Dolores", pasó a ser la primera guaracha en acordeón grabada en Colombia. Lisandro Meza fue pionero en su país, en grabar este ritmo.

Esos primeros tiempos se convirtieron en una interesante preparatoria. Luego conformó el grupo Lisandro Meza y Sus Alegres Muchachos. Con este conjunto se presentó en la ciudad de Cali, al suroeste de la capital colombiana. Por esa época fue invitado a varias importantes radioemisoras, ganado proyección nacional. Fue una puerta de entrada a la industria del disco.

No pasaría mucho tiempo en conseguir su primer contrato de grabación, con un sello discográfico de mayor alcance. Escogería 1957 como el año de inicio formal de su larga y fructífera carrera musical. Solo se detendría casi setena años después, con su muerte.

Género musical

Lisandro Meza se destacó por cantar música popular colombiana. Cultivó especialmente la música sabanera, característica de Sucre y los otros departamentos que integran la región sabanera de Colombia. La cumbia colombiana y sus diferentes subgéneros, fueron parte importante de su repertorio de canciones.

Incursionó también en el vallenato, el porro, el paseo sabanero y otros ritmos propios de la región. Incluso, grabó dos discos de salsa, que resultaron muy exitosos. Además del acordeón, su principal instrumento, logró dominar otros. Entre ellos, piano, guitarra, bajo, tiple, cuatro, tumbadora, caja y gaita.

Este singular cantautor describió su propuesta musical, de la siguiente manera. "La música de Lisandro Meza toca la fibra del folclor latinoamericano y más de la gente de Colombia, porque expresa las vivencias nuestras. Por eso las letras de mis canciones son agradables, porque tienen historias". Logró un estilo musical propio, que con orgullo llamó 'Estilo Limeza'. Fue la clave de su éxito, llegó a decir.

Trayectoria y Legado

Lisandro Meza fue uno de esos cantautores populares que, en vida, son considerados legendarios. Se convirtió en una leyenda viviente por la amplitud y la calidad de su música. Por lo innovador de varias de sus propuestas sonoras. Y por su inagotable y talentosa capacidad de trabajo, reflejada en una obra amena y prolífica.

Sus discos se cuentan por decenas. Se estima que publicó cerca de ciento treinta álbumes de larga duración. En esos trabajos reflejó su enorme versatilidad musical. Incursionó con éxito en diferentes géneros de la música popular colombiana y latinoamericana.

Asimismo, fue notable su capacidad como compositor y arreglista. Campo este último en que hizo innovaciones de gran importancia y proyección, además de lograr éxito comercial.

Marcó pauta al integrarse a diferentes grupos musicales, unos de su propiedad y otros de terceros. Hasta culminar con un conjunto de música, integrado por su esposa y sus hijos.

Recibió innumerables premios, nominaciones y reconocimientos de la industria musical. A veces como compositor y otras como cantautor.

Primeros triunfos

Lisandro Meza empezó a ganar popularidad, desde que realizó sus primeras grabaciones. Podría decirse que, con sus cuatro sencillos iniciales, tuvo un éxito moderado.

Canciones como "El aroma de las flores" o "Adiós Dolores", ambas de 1953, marcaron su comienzo. Le dieron cierta proyección en la escena musical colombiana. Fueron grabadas con un grupo que no era suyo. Quizás por eso consideró que su año de inicio profesional fue 1957. Tal vez solo las tomó como entrenamiento.

En 1958 grabó un sencillo de dos caras, con los temas "El Cocacolo cabellón" y "El muchacho alegre". Luego grabó un disco de larga duración, que no tuvo mayor trascendencia.

En 1964 publicó su disco "Mosaico doble cero", en el que incluye saxofones tenor y barítono. Buscaba una nueva sonoridad. De ese L.P. hay un tema que resultó un gran hit. Se trató de la canción "Juventud flaca y loca". Fue respaldado por el sello discográfico Vergara. Este éxito le abrió ampliamente las puertas de la industria musical. Otros conjuntos de música se vieron interesados en su trabajo, como arreglista y compositor.

Luego de ese triunfo, consiguió contrato con Discos Fuentes, una compañía discográfica de mayor alcance. Como artista exclusivo de la mencionada disquera, publicó el álbum "Ritmo de acordeones". Fue un disco que tuvo un gran impacto. Con ese trabajo, Lisandro Meza se dio a conocer en toda la geografía colombiana. Especialmente exitosos fueron los temas "El saludo" y "Acordeón pitador", ambos de la autoría del pujante cantautor piñalero.

Con esos hits, además de acordeonero y cantante, empezó a ganar popularidad como compositor. Atrás quedaba el anonimato. Por delante, un camino lleno de éxitos. El próximo sería "La gorra no se me cae", un tema publicado en 1963.

Lisandro Meza con Los Corraleros de Majagual

En 1965, ingresó en la agrupación Los Corraleros de Majagual. Fue por recomendación de Kike Bonfante, dado el retiro provisional de Alfredo Gutiérrez, El Rebelde del Acordeón.

Inquieto, talentoso y creativo como era Lisandro Meza, le pidió al director de Discos Fuentes, hacer un trabajo especial. Deseaba realizar la maqueta de un tema, porque él tenía un concepto diferente de la música. Don Antonio Fuentes solo le preguntó, qué necesitas.

Necesito trombón, saxo, conga, bajo electrónico, timbal y guacharaca, respondió el acordeonista de El Piñal. El director puso a su disposición todos los requerimientos para hacer la maqueta musical. El resultado fue impactante. Se produjo un sonido bien diferente al de Los Corraleros de Majagual. No obstante, gustó a los directivos de la disquera.

Veamos algunos detalles.

Lisandro Meza remplazó el guitarrón, con que se hacía el bajo, por el bajo electrónico. Con ese cambio, le modificó el patrón rítmico al bajo tradicional. Se dice que le dio protagonismo al bajo con los obligados (pausas e indicaciones), los cuales eran dictados por él.

Asimismo, cambió el patrón rítmico de la guacharaca en el 'paseaíto' del grupo original. Reemplazó la caja por el timbal. Y en esto, fue todavía más lejos. Como Los Corraleros de Majagual no tenían timbalero, Lisandro Meza se fijó en Julio Estrada. Este era un joven a cargo de la utilería del estudio, pero muy inquieto con la percusión. Le preguntó si había visto tocar al timbalero de la orquesta venezolana, Billo's Caracas Boys. Cuando el empleado asintió, le indicó: "así vas a tocar el timbal".

La maqueta se grabó cuando todo estuvo arreglado, quedando estructurada de la siguiente manera. El obligado del bajo le fue dictado a Jhon Mario Londoño. De igual forma se entregaron los arreglos transcritos, correspondientes al saxo y al trombón. También estaban listos los patrones rítmicos sugeridos para la conga y la guacharaca.

Cuando don Antonio Fuentes escuchó la maqueta, estaba con el resto de los integrantes de la agrupación. Luego llamó a su hijo, José María Fuentes, para pedirle que escuchara esa grabación de prueba. "No suena como Los Corraleros, pero suena bien", fue la respuesta.

Solo una pregunta surgió en el ambiente, quién había tocado el timbal. Lisandro Meza contestó que Fruko, señalando a Julio Estrada. "Mírele la cara y los dientes, parece la muñeca de Fruko que esta allá fuera". El joven quedó bautizado de esa manera. Además, por muchos años fue el timbalero de Los Corraleros de Majagual.

De esa maqueta salió el gran éxito, "Suéltala Pa' que se defienda". La canción fue interpretada por Tony Zúñiga, cantante sabanero de Santiago de Tolú, también en el departamento de Sucre.

Para entonces ya estaban grabados "La burrita", "La manzana", "La hierbita" y "Hace un mes", entre otros temas. Con gran sentido de la oportunidad y olfato para los negocios, el director pidió regrabarlos. Don Antonio Fuentes exigió que Lisandro Meza dictara los arreglos y obligados del bajo, para cada una de esas piezas.

La nueva producción se convirtió en un verdadero suceso musical. Los Corraleros de Majagual consiguieron una gran proyección internacional. Hay quien dice que se internacionalizó el estilo corralero. Y todavía más. Que la historia de esa famosa agrupación se partió en dos. Con un antes y un después, de Lisandro Meza.

Otros grandes logros de Lisandro Meza

Esa etapa con Los Corraleros de Majagual duró unos cinco años. Muchos de los músicos deseaban desarrollar proyectos musicales propios. Lisandro Meza había creado una nueva agrupación musical en 1965. En simunltáneo trabajó como acordeonista titular del grupo de don Antonio Fuentes, bajo la dirección de Manuel Cervantes.

Los festivales de música fueron parte significativa de la carrera artística de Lisandro Meza. Su primera participación en el Festival de la Leyenda Vallenata, fue en 1969. En ese importante certamen musical, el ganador obtiene el título de Rey Vallenato. Lamentablemente, en esa ocasión el dictamen del jurado le fue adverso. No llegó a una posición destacada.

Sin embargo, fue aclamado por el público. De ese tiempo le viene el apodo, El Rey Sin Corona. Más adelante lo usaría para titular una de sus canciones. Se volvió a presentar en la edición de 1975, del referido concurso de talento vocal. Quedó en segundo lugar.

En 1978, la edición del certamen se llevó a cabo en Sincelejo, Sucre. En esa ocasión resultó ganador. Fue proclamado Rey Sabanero Del Acordeón.

Nuevos discos saldrían por ese tiempo y en los años siguientes, produciendo canciones muy exitosas. De los setenta, por ejemplo, son temas que se hicieron muy populares, como los siguientes. "La miseria humana" (1976), "Entre rejas (1977), "El guayabo de la ye" (1978) y "Las tapas" (1979).

Otro tanto podría decirse de la década de los ochenta. Con temas como "La baracunataca" (1981) y, del año siguiente, "Me voy pa' la Luna" y "Estás pillao". Esta canción se convertiría pocos años después en un gran hit, al ser versionada por Las Chicas del Can.

Asimismo es preciso mencionar otros temas de los ochenta, como los siguientes. "¿Y de la plata, qué?" y "La matica", publicados en 1984. Son solo una muestra de las canciones que estrenó esos años.

De sus siguientes piezas musicalaes, también resultaron bien populares "El polvorete" y "La cumbia del amor". Asimismo, temas como "El hijo de tuta", "Adicción", "Alegría y amor", "Cumbia pa' oriente" y "El siete", entre otros. Con este último tema, incluido en su álbum "El mandamás", de 1989, tuvo un gran éxito comercial. El disco fue premiado en Estados Unidos, por el volumen de ventas.

Todos esos triunfos los obtuvo gracias a su 'estilo Limeza'.

Se cuenta que Lisandro Meza fue acompañante, como guacharaquero, de Alejandro Durán. Este era apodado el Rey Negro del Acordeón y fue el primer ganador del Festival de la Leyenda Vallenata.

Más de un centenar de discos publicó Lisandro Meza en vida, como se ha dicho antes. Algunos conocedores del movimiento del mercado discográfico, se atreven a decir cuáles fueron los más exitosos comercialmente.

Varios de sus álbumes más exitosos, fueron publicados en los noventa. Y no es debe extrañar que así haya sido, porque en ese período el cantautor fue especialmente fecundo. En esos años estrenó más de veinte discos. Entre otros, se mencionan los siguientes. "El Macho" (1994) y del año siguiente "Mi razón de ser", que ha sido reeditado varias veces. Otros álbumes exitosos, de esa década, son "Porque usted lo ha pedido" (1996) y "Solo por ti" (1997).

De sus discos recopilatorios es interesante mencionar el último, editado en 2018. Se trata de un álbum que celebra casi toda su carrera de músico y cantautor. Salió con el nombre de "El viaje musical de Lisandro Meza. 60 años. Vol. 1".

Su contribución a la música colombiana y otros logros

Lisandro Meza dejó un gran legado para la cultura musical colombiana y latinoamericana. Por su numerosa discografía, pero sobre todo por sus aportes novedosos. Gracias a esa labor, fue reconocido musicalmente en los cinco continentes.

Uno de esos aportes, como se mencionó antes, fue la modificación del patrón rítmico del bajo. Lo logró incorporando el bajo electrónico, con ciertos cambios en la manera de tocar las cuerdas. Variantes de este aporte fueron utilizados en diversos géneros de la música popular colombiana.

Cuando Lisandro Meza y su Combo Gigante se presentaron en 1970 en suelo estadounidense, establecieron una importante marca. En esa ocasión cantaron en el Hollywood Palladium, en California, batiendo récord de taquilla. Superó el que había impuesto Tom Jones la noche anterior, cuando vendió 9.700 entradas. Del show de los colombianos se vendieron 10.200 boletos.

Con la agrupación Lisandro Meza y Los Hijos de La Niña Luz, impuso el ritmo cumbión. Integrada por su esposa y sus hijos, la agrupación resultó un éxito. El nombre del conjunto surgió en una ocasión en que a su casa llegó un empresario que iba a contratarlo. En ese momento estaban interpretando una melodía de moda, pero el padre estaba ausente.

Al preguntar por Lisandro Meza, le indicaron que se encontraba fuera de la ciudad. El empresario respondió: "entonces yo me llevo a los hijos de La Niña Luz", cosa que no ocurrió. Sin embargo, de ahí surgió la idea de darle este nombre, a su grupo musical. Fue un sentido homenaje a su esposa, quien siempre se desveló por sus hijos y por él.

Su manera de interpretar la cumbia colombiana, con su estilo Limeza, forma parte del acervo musical sabanero. Su propuesta trascendió fronteras, llevando la cumbia colombiana por el mundo. Fue el primer cantautor, de Colombia, que estuvo de gira en África.

Fue postulado al Grammy, cuando no existía el Grammy Latino. Las primeras nominaciones se dieron, en varias ocasiones, junto con el El Gran Combo de Puerto Rico. En esa época poco se sabía en Colombia de esos premios. Por supuesto, no existían las redes sociales.

Lisandro Meza fue el autor del tema "Canta vallenato", interpretado por Los Hermanos Zuleta. Esa canción ganó el premio Grammy en la categoría Cumbia/Vallenato. Otro tanto ocurrió con "El tren", una pieza de su autoría. Ganó un premio Grammy al ser interpretada por el mexicano Celso Piña.

Lisandro Meza conquistó diecinueve veces el premio Disco Feria, de Cali. Se convirtió en el artista que, hasta ahora, ha ganado más veces en ese relevante galardón.

Todavía hoy, figura como el cantante colombiano que más ha grabado. Su catálogo se compone de ciento veintisiete trabajos discográficos, afirman sus hijos y administradores de su herencia musical.

Durante su larga y fructífera carrera artística, se presentó varias veces en importantes escenarios internacionales. Con su música, Lisandro Meza conquistó a numerosas audiencias de otros países y regiones de este continente. Realizó visitas triunfales a Ecuador, Chile, Perú, Centroamérica y México, además de presentarse en buena parte de Estados Unidos.

En el Madison Square Garden, por ejemplo, actuó en diferentes ocasiones. En este famoso coliseo neoyorquino, siempre dejó en alto la música colombiana. Fue considerado, con toda justicia, Embajador Musical de Colombia.

Su biografía fue publicada con el nombre de "Lisandro". De la autoría del escritor colombiano Amaury Pérez Banquet, el libro fue editado en 2018. Más adelante salió también en formato audiolibro.

Lisandro Meza fue el primer artista de música de acordeón, que empezó a recorrer el mundo. Quizás sin proponérselo, sentó un buen precedente. Abrió el camino para muchos exponentes de música popular colombiana, que han traspasado fronteras.

La música de Lisandro Meza también ha impactado a las nuevas generaciones de aficionados colombianos. Ha llegado a ellos por canciones populares y polémicas, como "Niño majadero". Es un tema que se hizo famoso también en México.

Asimismo, con piezas como "El hijo de tuta" y "Para político no". Son temas en los que, recurriendo al doble sentido, toca el sentimiento popular. Pero también roza algunos hechos sensibles para la vida de los colombianos.

En "El hijo de tuta", por ejemplo, se mofa de los jefes o mandamases que maltratan a sus empleados. El tema "Para político no", es una composición inspirada en los escándalos ocasionados por la parapolítica de Colombia. Volviendo al recurso del doble sentido, se burla de la desprestigiada clase política de su país.

Lisandro Meza y Los Hijos de La Niña Luz, recorrieron el mundo con su música. Llevaron la alegría de la música colombiana por todo el país. Pero también se la acercaron a miles de sus compatriotas que se encuentran en el exterior. De esa manera también la dio a conocer a muchos aficionados, de otras procedencias y culturas.

Por todo lo alto celebró Lisandro Meza sus seis décadas de vida artística. En La Feria de Cali de 2017, que también arribaba a sesenta años de creada, recibió un merecido homenaje. Se le reconoció por ser el artista con más discos en ese prestigioso evento.

Fue un artista que supo sortear muchos obstáculos. Tuvo el privilegio de trabajar en su música, casi hasta el final. A Lisandro Meza lo sobreviven su esposa y sus hijos. Y su gran legado musical.

Vida Personal

Lisandro Meza se casó con Luz María Domínguez, a quien por amor y admiración llamó después La Niña Luz. La boda se realizó el 22 de septiembre de 1957, en el municipio Los Palmitos, departamento Sucre.

De esa unión nacieron cinco hijas y dos hijos, todos profesionales. Y todos, parte de la agrupación Lisandro Meza y Los Hijos de La Niña luz. También se sabe que el maestro acordeonero tuvo otros hijos nueve hijos, fuera del matrimonio.

Muerte

Lisandro Meza murió en la ciudad de Sincelejo, capital del departamento colombiano de Sucre. El deceso fue informado en la tarde del 23 de diciembre de 2023, mediante un comunicado de prensa. El mismo fue emitido por personal autorizado del centro de salud donde permanecía hospitalizado. Poco tiempo despues, la familia también informaría del deceso.

Diecisiete días antes había sido recluido en la Clínica La Concepción, en Sincelejo. Fue internado por su familia cuando presentó dolor de cabeza, mareo, descoordinación motora y dificultad para hablar. Ese mismo día 6 de diciembre, fue pasado a la Unidad de Cuidados Intensivos. Experimentó períodos de mejoría, según informaron sus hijos a diferentes medios de comunicación. Sin embargo, no logró recuperarse.

En horas de la tarde de ese sábado 23 de diciembre, se dio la noticia desde el mencionado centro de salud. Se informó que la causa de la muerte fue consecuencia de una isquemia cerebral. Tenía ochenta y seis años de edad.

Lisandro Meza fue velado en su casa de Los Palmitos.

En medio de su dolor, la esposa manifestó su gratitud por haber compartido más sesenta años de matrimonio.

"Fue un gran hombre, esposo, un gran padre, un gran hijo, fue grande en todo y le doy gracias a Dios por ayudarme a conservar este matrimonio, porque no es fácil estar al lado de un artista", dijo la viuda.

Varios artistas y personalidades públicas manifestaron su pesar por el deceso de Lisandro Meza. También lo hicieron muchos de sus admiradores, a través de las redes sociales. De esos mensajes, citamos el comunicado de Discos Fuentes, a través de la red social X.

"Un día antes de celebrar la navidad en Colombia recibimos una triste noticia. Desde Discos Fuentes lamentamos profundamente el fallecimiento de Lisandro Meza a sus 86 años. Un increíble juglar que alegró las fiestas y navidades de todos los colombianos. ¡Maestro, vuela alto! ¡Siempre te llevaremos en nuestros corazones!"

Durante los primeros días de 2024, ha surgido la inquietud de cómo se repartirá la herencia del exitoso músico y cantautor. En una entrevista del programa radial Buen día Colombia, trasmitido por la emisora RCN, se abordó el tema. Juan José Meza, hijo del cantante, aclaró que son dieciséis los hermanos que comparten la misma ascendencia paterna. Afirmó que su padre habló expresamente sobre este asunto. Manifestó su deseo de que "si llegaba a faltar, la herencia debía ser repartida equitativamente entre todos los hijos".

Su legado va mucho más allá de las abultadas cifras producidas por su éxito comercial. Propulsor y divulgador de la música colombiana por el mundo, Lisandro Meza dejó una huella profunda. Con su 'música para alegrar el mundo', como bien dijera su esposa durante el velatorio, llegó a millones de aficionados. A esos admiradores de la cumbia colombiana y del vallenato. Pero también a muchos amantes del porro y el paseíto sabanero. Incluso, supo cantar salsa.

Reconocido como un juglar de la música sabanera, despuntó no solo como cantautor solista. Su genio creador fue el artífice del éxito de otras agrupaciones, que alcanzaron fama internacional. Se convirtió en un icono del vallenato y así es reconocido en la escena musical latinoamericana.