Róisín Murphy es enormemente conocida por el dúo Moloko. Tras cuatro exitosos discos junto a Mark Brydon , decidió dar el salto y grabar su propio álbum en solitario, escrito y producido con Matthew Herbert, que aporta su particular universo musical: una fusión de estilos diversos como el jazz, el house, el funk y, por supuesto, la electrónica. Claro que, en la práctica, su sonoridad está muy cercana a la de los álbumes de Herbert, es decir, una personal concepción de la electrónica, con ritmos de house y mucho sabor a jazz.

La colaboración entre Róisín Murphy y Matthew Herbert comenzó a darse indirectamente cuando el maestro inglés del Jazz-House produjo los primeros remixes de temas de Moloko. Memorable es su remezcla house de Sing it back (incluida en Secondhand sounds). El propio Herbert ha declarado: “siempre me gustó la facilidad con la que su voz se acopló a las texturas y los sonidos con los que he trabajo”.

Finalmente, en sus tiempos libres, se...